VER VÍDEO
En este mundo es natural que se tengan problemas de diferente índole, algunos por falta de dinero, a otros les sobra el dinero, pero están enfermos, otros están enfermos y no tienen dinero, en fin unos tienen más problemas que otros, pero nadie se escapa de los problemas. Jesucristo mismo les dijo a sus discípulos que mientras estén en este mundo tendrían aflicciones. Juan 16: 33 “Estas cosas os he hablado para que en mí tengáis paz. En el mundo tendréis aflicción; pero confiad, yo he vencido al mundo.”
En marcos encontramos lo que le paso a un
seguidor de Jesús, un seguidor anónimo que por su forma de actuar no quedo sino
en el recuerdo de marcos ya que los otros evangelistas no lo mencionan.
Que hace que una persona quede en el anonimato,
que deje de ser importante. Conozcamos lo sucedido, porque en este caso no
podemos decir conozcamos al personaje, porque ni el nombre se conoce. V 51-52 “Pero cierto joven le seguía, cubierto
el cuerpo con una sábana; y le prendieron; 14:52 mas él, dejando la
sábana, huyó desnudo.”
Hay muchas personas que siguen a Jesús, unos lo
hacen abiertamente como en el caso de los discípulos de Jesús, ellos no eran
discípulos encubiertos, lo que paso es que al final el miedo les gano y también
huyeron. V 50 “Entonces todos los discípulos,
dejándole, huyeron.”
Este joven quería hacer lo de la avestruz;
esconder la cabeza para evitar que la vean.
El hombre tiene la tendencia a esconderse
cuando está pasando por dificultades, esta costumbre viene desde Adán, el se
escondió tras de un árbol, este joven tras de una sabana, y ¿tu detrás de que
te escondes?
El esconderse genera:
1. Alejamiento. Este joven seguía a Jesús pero
no estaba cerca, es muy difícil conocer a alguien cuando se está lejos. Si quieres conocer y amar a tu familia
entonces acércate a ella. Si quieres conocer a Dios acércate a él.
2. Irresponsabilidad. El esconderse de los
problemas es un acto de irresponsabilidad, el problema en lugar de terminarse,
tiende hacerse más grande.
3. Verguenza. En la biblia el quedarse desnudo
significa vergüenza. Tarde o temprano el que no enfrenta sus problemas queda en
vergüenza.
Y sobre todo de Dios no nos podemos esconder. Salmos 139:7-12 “¿A dónde me iré de tu Espíritu?
¿Y a dónde huiré de tu presencia? 139:8 Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. 139:9 Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, 139:10 Aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra. 139:11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá alrededor de mí. 139:12 Aun las tinieblas no encubren de ti, Y la noche resplandece como el día; Lo mismo te son las tinieblas que la luz.”
¿Y a dónde huiré de tu presencia? 139:8 Si subiere a los cielos, allí estás tú; Y si en el Seol hiciere mi estrado, he aquí, allí tú estás. 139:9 Si tomare las alas del alba Y habitare en el extremo del mar, 139:10 Aun allí me guiará tu mano, Y me asirá tu diestra. 139:11 Si dijere: Ciertamente las tinieblas me encubrirán;
Aun la noche resplandecerá alrededor de mí. 139:12 Aun las tinieblas no encubren de ti, Y la noche resplandece como el día; Lo mismo te son las tinieblas que la luz.”
Pero también podemos ver desde otro
punto de vista el episodio de este joven.
La situación era difícil. Jesús estaba siendo preso. V 45- 46 “Y cuando vino, se acercó luego a él, y
le dijo: Maestro, Maestro. Y le besó. 14:46 Entonces ellos le echaron
mano, y le prendieron.”
Los discípulos huyeron del lugar. V 50 “Entonces todos los discípulos,
dejándole, huyeron.” El miedo se apodero de ellos y no
pudieron resistir lo que estaba pasando.
Pero alguien, marco la diferencia
escondido en su sabana un joven lo seguía. V 51 “Pero cierto joven le seguía, cubierto
el cuerpo con una sábana”
Pero sucedió lo inesperado lo descubrieron. V 51 b “y le prendieron;” y lo más lógico es que empezaron a forcejear. Por mucho que el luchaba
no podía soltarse de sus agresores, hasta que se le ocurrió algo: soltó la
sabana que le impedía defenderse y correr. V 52 “mas él, dejando la sábana, huyó
desnudo.”
Logro escapar, no como no como Rambo o cualquier protagonista de
película, que con sus artes marciales hace maravillas, lo hizo al estilo de José
el de los sueños que cuando fue acosado por la mujer de Potifar, dejo la ropa y
huyo del pecado como todo héroe cristiano. Génesis 39: 12 “Y ella lo asió por su ropa, diciendo:
Duerme conmigo. Entonces él dejó su ropa en las manos de ella, y huyó y salió.”
Muchas veces para poder huir de las presiones del mundo es necesario
dejar cosas, que nos impiden avanzar. Que necesitas dejar, cuál es tu sabana
que no te permite alejarte del mundo. Tus antiguas amistades, la televisión,
los juegos, las tradiciones de tu antigua religión. Etc.
Hay muchas interpretaciones para esta historia, lo importante es que esa
sabana para ti no sea un escondite para el pecado, ni tampoco algo que te impide
avanzar, más bien que esa sabana sea la protección de Cristo. Si te la quitas
puedes quedar desnudo.