VER VÍDEO
Santo significa apartado. Apartado del mundo para Cristo. Algunos Dios los aparta, otros toman la decisión de apartarse.
Santo no es aquel que nunca ha
cometido un pecado o que desde la cuna esta en los caminos de Dios, santo es
aquel que a tomado la decisión de pelear contra el pecado. Es decir lucha por
no pecar.
Satanás no puede dominar nuestra
mente, pero la puede contaminar a través de nuestros sentidos.
Satanás
lo que hace es propiciar a través del mundo la ocasión para pecar.
Ocasión significa: momento. Circunstancias
o la oportunidad para hacer algo. En el mundo hay un dicho muy popular que
dice: la ocasión hace al ladrón.
El enemigo sabe que desde Adán, el
mal está en nosotros los hombres. Romanos 7: 18 “Y yo sé que en mí, esto es, en mi carne, no mora el
bien; porque el querer el bien está en mí, pero no el hacerlo.” lo único que puede ayudarnos en la lucha contra el pecado es la oración constante.
En el mundo ese mal en nuestro
interior era como una gran fogata. Cuando recibimos a Cristo esa fogata se minimiza,
ya no es como una fogata ahora es como una pequeña Llamita. El diablo se la
pasa soplando, brindando oportunidades con la esperanza de que ese pequeño fuego
un día se vuelva a encender como una fogata.
Nadie atenta contra su propio
cuerpo, Nadia va a tomar la decisión de cortarse un brazo, una pierna o sacarse
un ojo solo porque si. Pero si ese brazo esta con cáncer y el médico determina
que puede contaminar a todo el cuerpo, el mismo medico ordena amputarlo. Es
mejor mantener todo el cuerpo sano sacrificando uno de sus órganos a tener que
contaminar todo el cuerpo por no arrancar ese brazo.
Jesucristo nos aconseja que si
queremos tener la salvación es necesario cortar algunos de nuestros órganos
contaminados, pero no lo dice de manera literal, lo hace como un ejemplo teniendo
en cuenta que la iglesia es el cuerpo de Cristo.
Hay tres formas mediante las cuales
el mundo puede contaminar a un cristiano.
1. Lo que hacemos. 43 a “Si
tu mano te fuere ocasión de caer, córtala; mejor te es entrar en la vida manco,
que teniendo dos manos ir al infierno” la mano significa nuestros actos,
lo que hacemos. Una frase popular dice: juego de manos juego de villanos. La
solución es cortarla. ¡Que! La Mano física. ¡No! El versículo dice si tu mano
te fuere ocasión de caer. Entonces que debemos
cortar. La ocasión. En qué
momento es que siento que puedo caer en pecado. La mejor manera de cortar
seria, evitando esos momentos, esos encuentros, no propiciando esas
oportunidades.
Esto de ninguna manera es fácil, se
necesita de gran esfuerzo y deseo de no caer. ¿Cómo conseguía pablo mantenerse
santo? El se obliga. 1 Corintios 9: 27 “sino que golpeo mi cuerpo, y lo pongo
en servidumbre, no sea que habiendo sido heraldo para otros, yo mismo venga a
ser eliminado.”
2. Los lugares que frecuento. V 45
“Y si tu pie te fuere ocasión de caer, córtalo; mejor te es
entrar a la vida cojo, que teniendo dos pies ser echado en el infierno, al
fuego que no puede ser apagado,” hay cristianos que ya no juegan, pero les gusta frecuentar casinos,
bares, con la excusa que solo están mirando. Esos lugares que te son ocasión
para caer es necesario que los arranques de tu vida.
3. Lo que vemos. V 47 “Y
si tu ojo te fuere ocasión de caer, sácalo; mejor te es entrar en el reino de
Dios con un ojo, que teniendo dos ojos ser echado al infierno,” nuestros
ojos son las ventanas de nuestra alma. Tal vez podemos cuidarnos de no hacer
cosas, nos cuidamos de no ir a ciertos lugares, pero es muy difícil no mirar.
En algunos casos el mirar no es el problema ya que todos tenemos que transitar por la calle y
muchas veces resulta imposible no mirar.
El problema es la intención con la que se mira.
Pero hay otras veces que si podemos
arrancar de nosotros lo que miramos. Por ejemplo la pornografía. Si la
pornografía es un mal que te cuesta arrancar de tu corazón, entonces arranca la
ocasión. Si es necesario quita el internet de tu oficina, si trabajas con el
internet entonces busca la forma de neutralizar esas páginas de pornografía.
Etc. La cuestión es que tienes que arrancar lo que estás viendo.
Recuerda: “la ocasión hace al ladrón”.
Pero sabes que es lo más
maravilloso. No estamos solos. Dios nos ayuda si se lo pedimos. Además a través
de la oración podemos activar lo que Dios nos dio a todos. Dominio propio. 2
Timoteo 1: 7 “Porque
no nos ha dado Dios espíritu de cobardía, sino de poder, de amor y de dominio
propio.”
Lo importante es renovar nuestra
manera de pensar. Romanos 12: 2 “No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio
de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la
buena voluntad de Dios, agradable y perfecta.”
Nuestro cuerpo siente y hace lo que
nuestra mente quiere
Recibe tu Devocional Diario: (Clik.Me Gusta) FACEBOOK: pastor jose luis Dejoy